viernes, 7 de noviembre de 2014

Illena.

Illena.
Mi princesa, mi hermosa hija del océano.
Quiero  que sepas que no te he olvidado, que mi mente no me ha permitido ocultar la mágica noche que pasé a tu lado, que la imagen de tu cuerpo resplandeciente a la luz del atardecer sigue vívida en mi interior.
Te encontré en la playa, a la orilla del mar, apenas cubierta por el agua y la espuma que llegaban a alcanzarte. No me viste al principio, y yo estaba demasiado sorprendido como para hablar, contemplando asombrado cómo balanceabas tranquila la cola de pez que sustituía a tus piernas.
Aún recuerdo la expresión de tu rostro cuando reparaste en mí. Me apenó reconocer el sobresalto en una faz tan hermosa, me entristeció vislumbrar el miedo en tus ojos azules y, por encima de todo, me derrumbó verte dar la vuelta y hundirte entre las olas, escapando de mí.
Grité, te llamé, corrí desesperado mar adentro hasta que mis pies dejaron de tocar la arena. No quería dejarte, no quería perderte, y ni siquiera te conocía. Durante el tiempo que estuve en el mar me imaginé nuestra boda, nuestra casa frente a la costa, nuestros hijos... ni siquiera reparé en tu cola de pez, eso me daba igual. Jamás me había sentido así, ni jamás lo he vuelto a experimentar.
Regresé desanimado y muerto de frío a la arena, y allí me quedé. Sencillamente, me negaba a darte por perdida, a convertirte en un fortuito instante más. Me senté en la orilla con la vista fija en el horizonte, hasta que me quedé dormido.
Me despertaron las gotas de agua cayendo de tu pelo, y lo primero que vi fue tu rostro sobre el mío, observándome curioso. Lo siguiente que recuerdo fue tu mano acariciando mi mejilla y, justo después, el roce de tus labios en los míos... creo que fue entonces cuando escuché tu nombre: Illena, mi hermosa ninfa del mar.
Puede que pasaran minutos, quizá horas... ¿quién sabe? Sólo puedo recordarte a ti, tendida sobre la espuma, con el cabello pegado a tu piel, sonriéndome entre beso y beso. Disfrutando del romance fugaz aquella noche de verano, iluminados por la luna y las estrellas.
Te marchaste al amanecer. Te fuiste sin una mirada, sin un adiós, sólo regalándome la vista de tu aleta ocultándose bajo el océano. Esa vez sabía que no volverías; que sólo habías vuelto para reglarme tu amor, pero que jamás volvería a verte.
Me marché a casa, a mi familia, a mi mundo que ahora me parecía vacío, pero prometí que no te olvidaría. Que jamás dejaría que mi mente te borrara, que mis labios nunca abandonarían el sabor de los tuyos, que siempre recordaría el tacto de tu piel en las noches solitarias.
Espero que tú también pienses en mí, Illena; a cada segundo, de vez en cuando, en realidad me da igual. Sólo deseo ocupar un rincón de tu mente, de tu corazón, mientras atraviesas nadando cada océano existente, mientras te abrazas a las rocas empapadas, mientras te recuestas en las playas mirando las horas pasar... Sólo deseo que me quieras, aunque sea un poco.

Que me quieras como yo te quiero a ti.

sábado, 1 de noviembre de 2014

Book Tag de Halloween.

¡Hola, mis niños! Hoy os traigo una entrada que sólo he hecho una vez, un Book Tag. Lo encontré en el blog www.vivimosentrepaginas.blogspot.com


Este, a diferencia del primero, lo he hecho por iniciativa propia, y se basa en Halloween. Como algunos ya sabréis, es mi fiesta favorita y, como no he hecho ningún especial ni nada, me sentía “moralmente obligada” a hacerlo... que se me ha encaprichado, vaya.
Bueno, aquí va, espero que os guste.

CALABAZAS
¿Qué libro te gustaría poner dentro de una calabaza y quemarlo?

No es que lo odie (los libros que odio no los suelo terminar), pero, en mi opinión, “Deja en paz al diablo” no le llega a la suela del zapato a los demás libros de la saga de David Gurney, que me para mí son espectaculares.


TRUCO O TRATO
¿Qué personaje es un truco (antes lo odiabas pero al final te gustó) y cuál un trato (lo amas)?


Severus Snape, de “Harry Potter”, es un truco. Soy de ese porcentaje de fans que se pasó gran parte de la saga odiándole, pero que al final cambió drásticamente de opinión. Para mí, ha terminado siendo uno de mis favoritos de la serie y le adoro.


Jacob “Jack” Redfield, de “Memorias de Idhún”, es seguramente el personaje literario que más amo.


GOMITAS
¿Qué libro es siempre dulce?


“Perdona si te llamo amor” es uno de los libros más románticos y azucarados que se me ocurren. Además me gustó.

FANTASMAS
¿Qué personaje te gustaría que te visitara como un fantasma?


Anna Korlov, de “Anna vestida de sangre”. ¿Quién mejor que mi fantasma favorita para protagonizar este apartado?


DISFRAZ
¿Qué personaje te gustaría ser por un día?


America Singer, de la saga de “La Selección”. Pienso que sería una experiencia vivir un día envuelta en vestidos preciosos y rodeada de comodidades... por lo menos seguro que sirve para relajarse.


MAGOS Y BRUJAS
¿Cuál es tu momento favorito de Harry Potter?




¿Sólo uno?, ¿es posible? Hay demasiados momentos maravillosos como para elegir uno sólo... voy a ser mala, elijo dos. El primero es el Mundial de Quidditch, porque junta este gran juego, la emoción, los campings y, lo más importante, la familia Weasley. El segundo es el momento en el que conocemos los recuerdos de Snape.


SANGRE
¿Qué libro era tan horripilante que tuviste que descansar un rato mientras lo leías?


“Frankenstein”. La razón no es que me diera miedo, sino que es demasiado deprimente. Cada vez que lo leía me entraba una tristeza horrible y, al cabo de los minutos, me empezaba a doler la cabeza horrores. Si no fuera porque era para el colegio no lo habría terminado.

Y hasta aquí el Book Tag, espero que, por lo menos, os haya entretenido. Os quiero.









domingo, 26 de octubre de 2014

La vida alrededor.

Me pregunto qué será de los demás.
Qué pasará en sus vidas, qué problemas tendrán.
Quizá no los sufran, quizá sean felices. Quizá sean peores que los míos.
Puede que sus sonrisas sean una tapadera; que se hundan en sus sentimientos cuando miran al frente por la calle; que las personas que veo paradas en las esquinas estén esperando nerviosas a su posible nuevo amor.
Puede que tras las ventanas encendidas no reine la felicidad y la paz de la luz, puede que ni siquiera exista un alma tras ellas.
Quizá el niño de allí no fue planeado; a lo mejor el libro entre las páginas de aquella mujer no es tan apasionante como su rostro refleja; puede que las lágrimas de ese joven sean de alegría.
Si no lo son, me gustaría consolarle, aumentar su felicidad, hacer algo por renovar la alegría del mundo. Ojalá pudiera escuchar su historia…
Me gustaría conocer la vida de alrededor. Saber lo que la gente piensa, lo que siente, entender el contenido de todas las vidas que pasan a mi lado.
Sentirme el generador y proporcionador de energía; siendo el mejor capacitado para ayudar a las personas, porque sólo yo las conocería de verdad.
Me gustaría tanto lograrlo… es mi sueño, mi deseo, mi don más ansiado.
Poder convertirme en el sabio del mundo, desvelar el misterio de las almas a mi alrededor, ser su luz en la oscuridad… Sólo yo, desde mi humilde soledad.


lunes, 20 de octubre de 2014

"Algo que nadie puede ver".


El fragmento que vais a leer no es mío, más quisiera.

Pertenece a “Toradora!” una serie anime que descubrí gracias a Lucía Valero, en su blog www.liberacionentreletras.blogspot.com (¡publicidad subliminal!). Es cortita, 25 capítulos que devoré en una semana, y os la recomiendo a todos, en serio, es preciosa. No voy a hablar aquí del argumento, ya que si escribo esto, es para compartir con vosotros el texto que aparece más abajo, pero lo podéis encontrar fácilmente en cualquier lugar.

En cuanto escuché las palabras que os traigo, me enamoré. Creo que hacía mucho tiempo que no leía algo, para mí, tan lleno de ese significado poético que tanto me gusta. Me emocioné, de verdad, al ver cómo se hacía referencia de una manera tan hermosa al amor (al menos yo creo que hablan del amor, vaya).

No sé qué os parecerá a vosotros; entenderé que no os guste, y que penséis que estoy exagerando en mi reacción, pero necesitaba compartirlo con vosotros, mis niños.

                                                                                                                                                 

“Existe algo en este mundo que nadie puede ver.

Es amable, y muy dulce.

Tal vez, si pudieran verlo, todos lucharían por él.

Por eso nadie lo ha visto. El mundo lo escondió de manera que no pudiera encontrarse fácilmente.

Sin embargo, algún día, alguien lo encontrará.

La persona que más lo merezca lo encontrará.”

 

 

 

 

 

Dentro de poco traeré más relatos, promesa. Es que se ha dado la casualidad…